Leandro es un adolescente, problemático y retraído. El quiebre de la estructura familiar, hace que encuentre contención en la «calle». Lentamente comienza a experimentar el camino de la trasgresión y la delincuencia. Su vínculo con Chachota, su compinche más cercano, se ha ido deteriorando y Leandro tiene la certeza que Chachota lo delato ante la policía. También lo involucra en una serie de atracos, que lo relacionan con el «Gordo» Ovalle, un oscuro delincuente, a quien la policía tiene en la mira hace ya un largo tiempo.