Durante los Juegos Olímpicos de Múnich de 1972, un equipo de transmisión estadounidense pasa de cubrir deportes a informar sobre una dramática situación de rehenes que involucra a atletas israelíes. Un joven productor, que inesperadamente dirige la transmisión en vivo, se enfrenta a decisiones difíciles mientras el tiempo se agota, los rumores se propagan y las vidas de los rehenes penden de un hilo.